Nymphomaniac Vol 1 Cut´s Director

Año: 2013

Director: Lars Von Trier

Hacía meses que una película no me arrastraba a escribir, que no me obligaba a teclear mis pésimas críticas, pero Lars Von Trier rompe con mi sequía.

Lo primero que me veo obligado a decir es que estamos ante una película blasfema hasta decir basta, y que será repudiada por la religión, la ética, lo cívico… pero no por el arte, si entendemos este en su cualidad de meter el dedo en la llaga, porque esta película no saca el dedo de esa llaga en ningún momento, de hecho, se recrea en ella una y otra vez, esa es su esencia.

Narrativamente es brillante. Por supuesto las relaciones entre la sexualidad más cruda y el refinamiento cultural pueden ser tachadas de incoherentes, pero qué carajo, la poesía visual les tiende los puentes necesarios, y la falta de prejuicios, el atrevimiento (recuerdo que he visto el montaje del director, sin censura, con pollas y coños al viento), la provocación, bien vale suspender el juicio para ponerte a aplaudir y decir, este cabrón llega a los límites, los recorre, los disfruta, y tiene la decencia de compartirlo filmando una obra como esta. Así que gracias, Trier (y sonrío, porque no puedo evitar pensar en Joaquín Reyes con su brillante y ya vieja imitación del danés).

En cuanto a los personajes, la pareja de baile principal combina de un modo tan arrítmico, tan insólito, incluso tan divertidos a veces, que son perfectos. No opino igual del tal Jeromé, que llega a molestarme por no considerarlo suficiente para ella, porque no me cuadra tal flaqueza, pero en fin, no hice yo la historia, y carezco de sus derechos.

Dos notas finales. Es difícil ser tan explícito y tan poco erótico, pero esa frialdad está calculada, y lo normal hubiese sido fallar: no es el caso. Segunda, esta biográfica y que no viene al caso, volví a disfrutar con Rammstein.

Y aún me queda el Volumen 2.